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Arquitectos: Peñafiel Arquitectos
- Área: 2660 m²
- Año: 2013
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Fotografías:Pablo Casals Aguirre
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Proveedores: Coggiola Mármoles, Concret Doctor, European Windows
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Un edificio de oficinas para Santiago.
Un prestigiado estudio de abogados chilenos tiene sus oficinas en el centro de Santiago, en un lugar que hoy está con un cierto grado de deterioro y con dificultades de acceso por el exceso de tráfico y de congestión. Los socios del estudio han tomado la decisión de trasladar sus instalaciones a la parte alta de la ciudad, donde en los últimos 50 años se ha ido desarrollando nuevos barrios residenciales y lugares de trabajo. La ubicación elegida no fue el barrio El Golf, que se ha constituido en el nuevo centro financiero e empresarial de la ciudad. Encontramos un terreno en la parte más antigua de Vitacura, barrio principalmente residencial donde han surgido zonas de comercio de buena calidad, hoteles, algunas oficinas. El lugar donde se emplaza el terreno está cerca de una avenida con comercio, oficinas y restoranes, pero todavía está dentro de la zona residencial. El fondo del terreno colinda con las instalaciones de la Cepal en Santiago.
Los clientes hicieron una solicitud especial. Nos pidieron un edificio que no parezca una torre de oficinas y donde se estuviera “como en una casa”. Tratando de descifrar lo que esto pudiera significar, partimos por lo de la torre de oficinas. Lo que no quierían es la imagen de un edificio de cristal con todas sus caras iguales y que pudiera estar en cualquier parte del mundo. Un edificio donde el interior estuviera conectado con el exterior solamente por el sentido de la visión. Donde el clima, la iluminación, los sistemas, todo funcione de manera artificial. Querían lo contrario. Un edificio conectado con el paisaje y con la naturaleza, donde las ventanas se puedan abrir y el aire fuera provisto directamente del exterior por las ventanas. Donde la luz de trabajo fuera natural. Un edificio donde, como en una casa, el interior sea un espacio unitario y reconocible, que se pueda recorrer y estar en contacto con el resto de los residentes.
En forma simultánea con los orígenes de este encargo, hice el Diplomado de Sustentabilidad en la Escuela de Arquitectura de la Universidad Católica y me propuse trabajar este proyecto desde este punto de vista desde su origen.
Uno de los aspectos más representativos de la forma de trabajar este proyecto fue el tema de las fachadas del edificio y sus conceptos. Al tomar la solicitud del cliente de no querer un edificio a la manera de una torre de oficinas, sino más bien como una casa, el camino comenzó por estudiar la piel que separa el interior del exterior en un edificio de oficinas.
En una torre de oficinas moderna, el espacio interior está separado del exterior por una membrana de cristal compuesta por un muro cortina que permite una vista al exterior y controla el paso de los rayos solares a través de las caracteristicas técnicas de los cristales. Lo que esta piel no puede controlar en cuanto a transmisión de temperatura, de radiación y de asoleamiento, se suple con gasto energético para contrarrestar los efectos de estos temas. Si el espacio interior se calienta más de los conveniente, se enfría con equipos eléctricos de climatización. Cuando la luz natural no puede llegar a ciertas zonas de trbajo, se complementa con iluminación artificial producida por energía eléctrica. En este caso estamos hablando de un edificio de sustentabildad activa.
En una casa en la zona central de Chile, su envolvente no es una piel de cristal. Una casa adaptada al clima de nuestra región tiene una piel que tiene un espesor. EL interior no se separa del exterior por medio de un cristal. Hay una fachada que es más compleja. Hay elementos que se abren para ventilar, ventanas para mirar al exterior. Ventanas para dejar pasar la luz. Elementos que sombrean las ventanas cuando se quiere controlar el calor o el paso del sol. La temperatura se baja produciendo corrientes de aire cruzado a través del interior de la casa. La temperatura se sube dejando parar el sol y conservando el calor al interior sin dejarlo escapar.
En un edificio de oficinas convencional, la mayor cantidad de energía se require para bajar la temperatura interior. Estos edificios captan sol y calor desde el exterior y producen calor en su interior por sus equipos de iluminación, por sus sistemas eléctrónicos, por las personas que los ocupan. En estos edificios se debe contrarrestar el calentamiento de su interior. Esto se puede lograr con equipos de mejor tecnología y más eficientes. Pero también se puede lograr de una manera simple, sombreando sus fachadas cuando esto sea conveniente, y dejando pasar el sol cuando sea necesario absorver calor. Las fachadas también tienen un papel importante cuando se trate de hacer pasar luz natural al interior reduciendo el consumo eléctrico para producir luz artificial.
La masa térmica, la aislación térmica, la ventilación natural, fueron temas abordados durante el diseño de este edificio. Con esto ya estamos hablando del diseño de un edificio de sustentabilidad pasiva.
Otra forma de cumplir el encargo de hacer un edificio a la manera de una casa fue la elección de los materiales. Por ejemplo, tener ventanas de madera, evitar los cielos modulares convencionales, etc. Todo se diseñó especialmente para lograr una sensación de estar en un lugar único y no en uno estandarizado con materiales que encontraremos an la mayoría de los edificios de oficinas contemporáneos.
Las fachadas y el sol.
Como se ha dicho, el concepto general para las fachadas fue el de permitir el paso del sol cuando se desea calentar el interior del edificio y sombrear las ventanas cuando se quiere dejar la radiación solar fuera. Además de esto, la intención fue la de siempre permitir el paso del máximo de luz natural a todos los lugares interiores que así lo requieran.
El edificio esta sostenido por una estructura de hormigón armado. Hay un nucleo sólido de muros en el corazón del cuerpo. Y luego en las fachadas, columnas estructurales que además conforman las fachadas. Estas fachadas están compuestas por estos elementos estructurales de hormigón y las ventanas. En las fachadas oriente y poniente, la estructura perimetral de hormigón despliega un sistema de “aletas” verticales del mismo material que se orientan hacia el norte. Con esto, se permite la entrada del sol invernal del oriente y del poniente, y se evita la entrada del sol por estas orientaciones en verano. En esta estación, las aletas hacen de quiebrasoles ya que su superficie es perpendicular a la dirección del sol en las mañanas y en las tardes. En la fachada sur, la estructura se reduce a su minima expresión, ya que no habrá en ella rayos solares que la impacten en forma directa y, por otro lado, se despeja las ventanas para permitir el máximo de entrada de luz. En la fachada norte no se necesita las aletas, ya que basta con tener elementos horizontales que sombreen las ventanas cuando el sol del verano golpea al edificio en forma vertical.
EL edificio es una obra de arquitectura y no un artefacto para controlar al sol. Por esta razón se empleó este método de sombreamiento en forma moderada, permitiendo las vistas y el contacto con el exterior más que la eficiencia térmica absoluta. EL concepto de la fachada se complementa con la calidad térmica de los cristales, con las ventanas que se abren para permitir la ventilación y con un sistema de climatización de apoyo.
El interior
El edificio albergará a una firma de abogados como un edificio corporativo. Por esta razón, su interior se ha diseñado como una unidad y no un edificio compartimentado por pisos aislados uno de otro. Se entra a un hall de una planta de altura, a la manera como se entra a un interior espacialmente controlado de una casa. Desde este hall se avanza hasta el atrio donde aparece la altura interior de todo el edificio como un patio interior. Este espacio tiene a la vista los halles de ascensores de todos los pisos creando una unidad espacial y relaciones visuales entre las personas que circulan alrededor de este lugar. Adicionalmente, este atrio tiene la función de regular la temperatura interior produciendo circulaciones de aire caliente ascendentes que salen al exterior por sus ventanas superiores. Por la noche, se abren las ventanas de la planta baja y las del piso superior produciendo un efecto chimenea del aire fresco que entra por abajo impulsando la salida superior del aire caliente. La masa térmica de los elementos de hormigón que conforman este espacio también contribuye a templar y a enfriar el edificio a lo largo del día y de la noche.
